lunes, 21 de enero de 2013

SE REUNEN EN LA HABANA LOS CANCILLERES DE VENEZUELA Y CUBA.


En horas de la mañana de este lunes, se produjo un amplio intercambio entre el compañero Elías Jaua, Vicepresidente del Consejo de Ministros   y Ministro del Poder Popular para las Relaciones Exteriores de la República Bolivariana de Venezuela y el Canciller cubano, Bruno Rodríguez Parrilla, en el que se abordaron importantes temas de la agenda bilateral y regional, en particular la próxima celebración de la I Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), en la que Cuba asumirá la presidencia pro témpore para el año 2013.

Durante el fraternal encuentro, ambos Cancilleres constataron el permanente desarrollo de las relaciones estratégicas y de hermandad entre ambos países y coincidieron en la necesidad de consolidar a la CELAC como espacio de soberanía regional y mecanismo esencial de integración latinoamericana y caribeña.

Al expresar su satisfacción por esta nueva visita a nuestro país, Elías Jaua reiteró la profunda gratitud de Venezuela al pueblo cubano y a sus dirigentes,  por el apoyo al Presidente Chávez  en el proceso de atención a su salud.

El ministro Bruno Rodríguez, por su parte, aseguró que Cuba estará siempre junto al Presidente Chávez y a la Revolución Bolivariana

sábado, 19 de enero de 2013

Una enfermedad reemergente


JOSÉ A. DE LA OSA
delaosa@granma.cip.cu

El cólera se considera en la actualidad una enfermedad reemergente, así denominadas .aquellas afecciones supuestamente controladas, en franco descenso o prácticamente desaparecidas, que vuelven a constituir una amenaza sanitaria, ratificó en La Habana el doctor Manuel Santín Peña, director Nacional de Epidemiología del Ministerio de Salud Pública.

El lavado de manos debe realizarse siempre antes de manipular o consumir alimentos, después de ir al baño, inmediatamente después del regreso de la calle y luego de la manipulación de objetos que pudieran estar contaminados. 

En el año 1998 se produjo un fuerte incremento de esta enfermedad en numerosos países de África y Asia, con elevadas tasas de morbilidad (frecuencia) y mortalidad, y que actualmente presentan un comportamiento endémico y epidémico del cólera.

Más recientemente, en el 2010, comenzó una importante epidemia en Haití, que luego afectó a República Dominicana, y posteriormente, con la aparición de brotes locales o casos importados, a los Estados Unidos, México, Venezuela, Canadá, Puerto Rico y la Isla San Martín en el Caribe. En Cuba, a partir de junio del pasado año, enfrentamos algunos brotes, que han sido rápidamente controlados por la vigilancia permanente y la capacidad de respuesta de nuestro sistema nacional de salud.

                                                                 Manuel Santín
                                                                 Mariano Bonet

De lo que se trata ahora no es solo ganar en percepción de riesgo de esta enfermedad, sino de asumir día a día la responsabilidad del cuidado de la salud personal y familiar, lo cual es imprescindible en la prevención del cólera y otras enfermedades gastrointestinales, y, en general, de afecciones transmisibles.
                                                                                                                
Igualmente es importante contribuir de manera permanente al saneamiento ambiental de la comunidad, como complemento ineludible de los cuidados sanitarios, junto a otras modificaciones de los estilos de vida.

La salud pública requiere, para el buen desempeño de su labor, de la colaboración de cada ciudadano y de todos los organismos, instituciones y organizaciones de la sociedad. Y este es un reto permanente.

Para conocer más de las diversas aristas que se derivan de esta enfermedad, y como vía de continuar elevando nuestra cultura en salud, nos reunimos ayer con los doctores Santín y Mariano Bonet Gorbea, director del Instituto Nacional de Higiene, Epidemiología y Microbiología, quienes aceptaron responder las inquietudes planteadas: 

—Y comenzamos con una imprescindible pregunta: ¿qué es el cólera?
—Es una enfermedad bacteriana intestinal aguda, altamente contagiosa, que se caracteriza por un inicio repentino. Se origina por la ingestión de alimentos o agua contaminados, por el contacto interpersonal, o con superficies y objetos que estén contaminados con heces, o sus residuos, contentivos del Vibrio cholerae.
—¿Hay un solo agente causal o son varios?
—Existen tres serogrupos principales, pero solo el O1 puede ocasionar el cólera. En Cuba se determinó que el agente causal es el Vibrio cholerae O1 El Tor enterotoxigénico serotipo Ogawa.
—¿Cuál es el período de incubación y transmisibilidad de esta bacteria?

—El de incubación es desde algunas horas hasta cinco días, y como promedio de dos a tres días; el de transmisibilidad mientras las heces sean positivas a la bacteria, lo que puede mantenerse durante periodos prolongados.

—¿Esta bacteria tiene capacidad de propagarse con mayor facilidad en determinadas épocas del año?

—Circula en cualquier época, pero con incrementos en las etapas lluviosas, y también como resultado de desastres naturales (ciclones, terremotos) o por cualquiera otra condición que produzca contaminación de las aguas o los alimentos.

—¿Cuál es su reservorio natural?

—Hay varios. Los principales son el hombre enfermo o el portador asintomático. Puede vivir durante largos periodos en plantas acuáticas.

—¿Durante qué tiempo puede sobrevivir esta bacteria en los alimentos?

—En alimentos cocinados, hortalizas, frutas, así como pescados y mariscos frescos, puede sobrevivir hasta siete días. En la leche y derivados, agua de mar y dulce, hasta los 14 días, o más. De ahí la importancia del cumplimiento de las medidas que se recomiendan para la elaboración y manejo de los alimentos. 

—¿El padecer el cólera una vez inmuniza de por vida?

—No. La inmunidad es corta, apenas dura tres meses, de manera que si la persona se vuelve a exponer a la bacteria por descuidar las medidas higiénicas, puede volverse a contagiar y enfermar. 

—¿Hay personas con mayor susceptibilidad para contraer esta enfermedad?

—Sí. Por ejemplo, personas con padecimientos de enfermedades gastrointestinales crónicas o inmunológicas, las que ingieren cantidades excesivas de alcohol y las que presentan desnutrición por diversas causas. Asimismo, los niños pequeños y los ancianos.

—¿Pueden existir portadores asintomáticos de la bacteria que no desarrollen la enfermedad y, sin embargo, puedan transmitirla?

—Efectivamente, en esta enfermedad existen portadores asintomáticos que, aunque en ellos no se manifiesta la afección, sí pueden transmitirla a otras personas porque en sus heces excretan también la bacteria. Un ejemplo de ello es el brote ocurrido en la provincia de La Habana.

—¿Ante qué primeros síntomas debemos sospechar la presencia de este padecimiento?

—Ante la aparición de diarreas, que no tienen que ser intensas ni repetidas. Siempre se debe acudir de inmediato al médico de familia o policlínico, donde están creadas las condiciones para ofrecer la atención necesaria. Es recomendable la administración de las Sales de Rehidratación Oral ante los primeros síntomas, a fin de evitar la deshidratación especialmente en las personas de mayor vulnerabilidad.

—¿Cómo se realiza el diagnóstico?

—Por la clínica, la investigación epidemiológica y los exámenes de laboratorio. Se cuenta con tiras reactivas para el diagnóstico rápido que sirve de orientación, confirmándose siempre mediante el examen microbiológico de las heces (coprocultivo). El país dispone de posibilidades diagnósticas en todo el territorio nacional.

—¿Debe adoptarse algún cuidado especial con las embarazadas y los lactantes?

—Por las condiciones propias del embarazo y de los niños menores de un año, hay que tener cuidado para que no se expongan a aguas ni alimentos contaminados, y extremar con ellos las medidas de higiene personal y familiar. Es esencial preservar a los niños pequeños de contactos interpersonales sin previa higienización de las manos.

—¿En cuanto a la terapéutica de elección?

—El tratamiento adecuado es la administración de las Sales de Rehidratación Oral y el empleo de antibióticos específicos En los casos que se requiera el médico indicará la hidratación intravenosa.

—¿Cómo evolucionan estos pacientes?

—La evolución debe ser favorable si cuando se manifiestan los primeros síntomas se acude al médico con rapidez. Los casos graves de cólera ocurren fundamentalmente debido a la tardanza de los pacientes en acudir a un centro asistencial.

—¿Cómo está actuando el sistema de salud ante un caso sospechoso de cólera?

—El sistema nacional de salud cuenta con la infraestructura y los recursos y medios necesarios para el tratamiento y prevención de la enfermedad y evitar así su extensión. Los médicos y enfermeras de familia, junto a equipos técnicos en las áreas de salud, actúan de manera inmediata ante la aparición de casos sospechosos, realizan la pesquisa activa de la población en la búsqueda de enfermos con diarrea, y desarrollan acciones de control higiénico-epidemiológicas y de educación. Se realiza el seguimiento diario en zonas con riesgos medioambientales no solo para el cólera, sino para otras enfermedades. 

—¿Por qué se insiste en el uso del hipoclorito de sodio al 1 % como medida preventiva?

—Porque es un producto que permite desinfectar de manera segura y con efecto duradero el agua de consumo (3 gotas por litro), los vegetales y las frutas; los utensilios de cocina, mesetas y otras superficies, y está disponible en las farmacias del país. Debe ser observada la fecha de vencimiento de ese producto que es de 30 días.

—¿Existe alguna vacuna para su prevención, o, al menos, en proyecto de investigación?

—Las vacunas disponibles contra el cólera solo confieren protección parcial, 50 % o menos, y por un periodo de tiempo limitado (de tres a seis meses como máximo). Instituciones científicas cubanas trabajan en el desarrollo de una vacuna que contribuya a la prevención de esta enfermedad.

—¿Cuáles son las medidas de mayor efectividad para la prevención del cólera?

—Están relacionadas con el consumo de agua desinfectada con cloro y alimentos higiénicamente elaborados y, asimismo, con la higiene personal y colectiva, fundamentalmente el lavado de manos, que debe realizarse siempre antes de manipular o consumir alimentos, después de ir al baño, inmediatamente después del regreso de la calle y luego de la manipulación de objetos que pudieran estar contaminados.

Es importante subrayar que las personas con participación en la alimentación pública o familiar deben crear las condiciones para poder cumplir con estas medidas de prevención. Hay que incrementar la exigencia sanitaria por las administraciones y los cuerpos de inspectores. Al mismo tiempo, las autoridades de salud hacen un llamado a la población a exigir el cumplimiento de las normas sanitarias en cualquier establecimiento.

—¿Cuál es la situación actual del brote en la provincia de La Habana informado en días pasados?

—Se continúa trabajando intensamente y hoy está prácticamente cerrado. No obstante, se mantendrá activado el sistema de vigilancia y el seguimiento de las medidas de sostenibilidad para disminuir vulnerabilidades y condiciones de riesgo.